La amenaza de la gripe aviar H5N1 ha trascendido a las aves y ahora impacta directamente en las granjas lecheras de Estados Unidos. Investigadores han detectado el virus no solo en la leche y el equipo de ordeño, sino también en aguas residuales y el aire de los establecimientos afectados, lo que incrementa el riesgo para los trabajadores. Hasta ahora, se han registrado 41 casos humanos vinculados al contacto con el ganado.
Un estudio reciente realizado en California, liderado por la Universidad Emory, reveló que el ambiente de estas granjas está “altamente contaminado”, lo que explica la rápida propagación del H5N1 entre el ganado y, en ciertos casos, hacia los humanos. Los investigadores identificaron partículas del virus flotando en el aire —desde gotas grandes hasta aerosoles diminutos— y presentes en desagües, lagunas de estiércol y equipos de trabajo. Esto indica que las vacas pueden contagiarse no solo por contacto directo, sino también al inhalar, lamer o tocar superficies contaminadas.
El doctor Richard Webby, especialista en enfermedades infecciosas, advierte que estas condiciones convierten a las granjas en “entornos extremadamente contaminados”, con múltiples rutas de transmisión para el virus.
Aunque inicialmente se creía que la principal vía de contagio era el contacto con equipos de ordeño contaminados, un experimento de la Universidad Estatal de Ohio demostró que la alta carga viral en el ambiente es en realidad el motor principal de los brotes. La investigación evaluó 14 granjas durante el pico del brote 2024-2025 y concluyó que no existe un único evento que explique la propagación: todo el entorno contribuye al riesgo.
Para reducir la exposición, los especialistas recomiendan:
- Uso de protectores faciales para bloquear aerosoles.
- Pruebas rápidas de H5N1 en granjas.
- Tratamiento de la leche contaminada antes de desecharla, con soluciones como vinagre o jugo de limón para inactivar el virus.
El hallazgo de H5N1 en aire, agua y superficies obliga a reforzar la bioseguridad. El objetivo es proteger tanto al ganado como a los trabajadores, y prevenir que el virus evolucione hacia una amenaza mayor para la salud humana.
Como advierten los expertos, la lucha contra este brote es una carrera que aún no termina, y requiere de acciones rápidas y coordinadas para frenar la expansión del H5N1.
— Tres65 Noticias









